Las mujeres seleccionadoras de minerales, son la consecuencia inmediata al nacimiento de un centro minero, que luego se transforma en un pueblo. La mujeres llegan aveces acompañando a sus esposos y sus hijos pequeños. Algunas veces llegan obligadas por la necesidad de ayudar en la economía del hogar. Otras veces llegan para salir del abandono familiar y de la violencia doméstica. Pero siempre llegan como la única alternativa de escapar a la miseria.
Organizaciones
Asociación de Mineras Seleccionadoras de Mineral de Cuatro Horas
“El cambio en las organizaciones de mujeres ha incrementado la visibilidad de la minería, otorgándole un mayor valor a las contribuciones de las mujeres a las comunidades mineras y mejorando las relaciones de negocios.”
Asociación de Mineras Clasificadoras de Cuatro Horas está ubicada en el distrito de Chaparra, provincia de Caraveli, departamento de Arequipa, Perú. Como organización sin ánimo de lucro, está reconocida en los registros públicos de Camaná y pertenece a la Asociación Nacional de Mujeres Artesanales en Perú. Cerca de 150 familias dependen de las actividades de la organización, directa e indirectamente.
La asociación fue creada en 2004 para generar ingresos para las mujeres locales a través de actividades de pallaqueo, recolectando y clasificando materiales y desperdicios. Actualmente hay 150 mujeres trabajando con la asociación como recolectoras y clasificadoras de mineral descartado de MACDESA para aumentar sus utilidades y el ingreso familiar y para asegurar el sostenimiento básico de sus hijos.
Las mujeres trabajan en grupos de 40 en los sitios, cada día durante sólo tres horas de 6am a 9am. Su trabajo es coordinado con la Compañía MACDESA, la cual las autoriza mediante un acuerdo para tener acceso a las colinas donde están ubicados los sitios. Los miembros pueden vender el oro nuevamente a la compañía.
La Compañía MACDESA provee apoyo social por medio de suministrar electricidad y televisión por cable, pagando los salarios de los profesores y ofreciendo servicios médicos y de obstetricia a un costo muy bajo. La compañía también organiza el transporte y el procesamiento de los minerales recolectados.
Asociación de Mujeres Mineras "Nueva Esperanza", Santa Filomena
“La base para incluir la minería artesanal y en pequeña escala dentro de los Proyectos Pilotos de Fairtrade ha experimentado un cambio sustancial. Los socios y administradores de las organizaciones pilotos creen que el desarrollo debe ser emprendido de una manera holística, respetando el medio ambiente, eliminando todas las formas de explotación y trabajo infantil e incorporando el trabajo de las mujeres mineras.”
La Asociación de Mujeres Pallaqueras (seleccionadoras de mineral) de “Nueva Esperanza” está ubicada en el pueblo de Santa Filomena, en el distrito de Sancos, provincia de Lucanas, departamento de Ayacucho, Perú. Como una asociación sin ánimo de lucro, está reconocida en los registros públicos de Nazca y pertenece a la Asociación Nacional de Mujeres Mineras Artesanales en Perú. Alrededor de 180 familias dependen de las actividades de la organización, tanto directa como indirectamente.
La asociación comenzó con 40 mujeres y ahora hay 180 miembros que ejecutan el trabajo de pallaqueo, coleccionando y clasificando minerales valiosos y desperdicio, que luego son vendidos a la compañía SOTRAMI para generar más ingreso para sus hogares. La asociación fue establecida en 2003, y se formó en respuesta a la necesidad de organizar el trabajo en turnos y las horas de pallaqueo (recolección) de tal manera que fueran accesibles a todos los miembros, permitiéndoles a las mujeres y a las madres solteras llevar a cabo todas las labores de forma segura y organizada.
La junta está compuesta de ocho miembros y se reúne cuando se requieren tomar las principales decisiones. Los miembros están organizados en dos grupos recolectores de acuerdo con los estatutos de la asociación, trabajando de 2pm a 6pm cada tarde. Tal periodo fue escogido para ajustarse a las demandas de cuidado de los niños y responsabilidades domésticas de las mujeres.
Las asociadas utilizan cada una un rastrillo de mano y un costal, y se les requiere que usen equipo de seguridad mientras pallequean (recolectan) los minerales, el cual incluye camisas de manga larga, pantalones termales de algodón, gorras o sombreros, zapatillas deportivas sin cordones y bufandas de franela roja para protegerlas del polvo.
SOTRAMI les suministra un vagón para ellas diariamente en el punto de pallaqueo, donde el mineral es vendido a la compañía para procesamiento, y a las mujeres se les paga en efectivo.
La asociación les prohíbe a las mujeres menores de 18 años trabajar en la recolección, a menos que sean madres adolescentes que no tengan el apoyo económico de un esposo. A los hombres y mujeres ancianos y con incapacidades físicas también se les permite recolectar. La asociación tiene una guardería donde los asociados pueden dejar a sus niños más pequeños mientras trabajan, con el trabajo de cuidado de los niños llevado a cabo por las mismas mujeres que se organizan en turnos para realizar las diferentes tareas. La guardería tiene varias facilidades, incluyendo juegos educativos para los niños, dos camas y dos cunas, una televisión a color, mesas y sillas, una cocina y un tanque de almacenamiento.
Las mujeres mineras se han tornado cada vez más empoderadas durante los tres años pasados, al participar en talleres y reuniones con mineros artesanales de otras regiones y países. Todas están muy interesadas en alcanzar la certificación Fairtrade-Fairmined, puesto que comparten fuertemente los valores que ella representa.
Fuente: Minería artesanal Perú